Descripción

El Observatorio de la Criminalidad Organizada Transnacional – OCOT tiene como antecedente la constitución del Proyecto Europeo International Flow Observation, financiado por la Unión Europea para formar a jueces y policías en el ámbito de una lucha más eficaz contra el tráfico de drogas de carácter internacional (2012-2014). Ha estado constituido inicialmente por miembros de la Universidad de Salamanca, la Università di Palermo y la Fondazione Rocco Chinnici. La experiencia adquirida, las necesidades formativas detectadas y la complejidad de una lucha eficaz contra la criminalidad organizada transnacional nos encaminaron a fraguar un ámbito de trabajo más amplio, inicialmente con el Proyecto DER2013-44228-R, denominado “La criminalidad organizada transnacional: una amenaza a la seguridad de los Estados democráticos” (2013-2016) y, recientemente, con el Proyecto PID2020-117403RB-100, titulado “Criminalidad organizada transnacional y empresas multinacionales ante las vulneraciones a los Derechos Humanos” (2020-2023). Estos proyectos han sido contemplados con la financiación, respectivamente, del Ministerio de Economía y Competitividad y del Ministerio de Ciencia e Innovación españoles.
 

Partiendo de estos antecedentes hemos perfilado la idea de que desentrañar las diversas redes que forman parte de la criminalidad organizada transnacional constituye una de las tareas más importantes de la Política Criminal moderna. Para ello se requieren grupos de trabajos interdisciplinares, de carácter internacional, que analicen y expliquen transversalmente las características, causas, efectos, propuestas, programas de la criminalidad organizada transnacional, a los efectos de comprender el fenómeno criminal y dar una respuesta científica al mismo. Los trabajos en este campo suelen ser parciales, esto es, centrados en alguna de sus expresiones concretas, como el tráfico de drogas, el tráfico y trata de seres humanos, el blanqueo de capitales, etc. Todos temas fundamentales, aunque no siempre visualizan la escala mayor de la complejidad del asunto, los problemas de la transnacionalidad de las figuras criminales, las diversas formas de colaboración entre distintas formas de criminalidad como el terrorismo, la corrupción o la criminalidad empresarial y los fenómenos de hibridación modernos que plantean nuevos retos a la seguridad internacional.
 

En este sentido, nuestros objetivos centrales, no son ni más ni menos que plantear propuestas para coadyuvar los retos de política criminal integral (de control social formal e informal) que plantea la Convención de Palermo de 2000: armonización de las legislaciones penales y cooperación judicial y policial. Para llegar a ello se requiere dar muchos pasos previos ante un fenómeno poliédrico, cambiante y fácilmente camuflado en las instituciones legales de muchos países.
 

En la actualidad, los equipos de investigación y de trabajo cuentan con investigadores en Derecho Penal, Criminología, Derecho Tributario, Relaciones Internacionales, Ética para conformar un coro de especialistas capaces de reflexionar y proponer respuestas holísticas a los problemas que plantean estas nuevas formas de criminalidad de las organizaciones. Como señala Boaventura de Sousa Santos: “Vivimos tiempos de problemas fuertes y respuestas débiles”. El Observatorio de la Criminalidad Organizada Transnacional intentará plantear respuestas que concilien la rigurosidad del sistema de garantías del Estado de Derecho con la eficiencia en la prevención de la criminalidad. Creemos que esta es la dirección en el camino de las respuestas fuertes.